Soneto a mi peor crítico
Estos versos para ti voy a medir.
No espero alabanzas, sí puñaladas
de tus palabras, tan bien lavadas.
Ruego a Caín fuerzas para recibir.
¡Qué osadía un soneto escribir!
Donde los maestros hundían armadas
sólo estas sílabas dedicadas,
para ser poeta, o al menos fingir.
No me cabe duda alguna factible,
seguro usted sobre el texto miccione.
Su gusto no es a mi rima asequible.
Propongo antes, señor, que me cuestione,
oferta de rechazar imposible.
¿Qué hay que una cerveza no solucione?
1 comentario:
Rima y remedia
No seas demas oneroso crítico
que la gloria y fama se le ha escapado
que tanta maestría ha demostrado
no le ascenderá ser poeta mítico.
Con ínfulas de poema imítico
trata de bufar al enemistado
cuyo ego no se revuelve afrentado.
Sea la puya de atino analítico
que pena caro del rimar el verso
rebuscando las letras colocadas
en tapiz inocentemente terso,
que a la historia se miran abocadas
en contra del ingeniero perverso
de rimas pronto en el tiempo olvidadas.
Publicar un comentario